Aguas Oscuras. Claudia Gray

Autora: Claudia Gray

Editorial: Montena

Colección: Ellas

PVP: 14,95€

Páginas: 342

Encuadernación: tapa blanda con solapas

Sinopsis

La embarcación más lujosa de todos los tiempos, el Titanic, está a punto de zarpar con destino a Nueva York. En él viajará Tess, una chica de 18 años que trabaja como sirvienta y sueña con llegar a Estados Unidos para empezar una nueva vida, y también Álec, un atractivo viajero de primera clase, hijo de un poderoso magnate americano, por quien Tess siente una atracción instantánea. En un viaje marcado por la fatalidad, en el que los secretos más oscuros saldrán a la luz, Tess y Álec deberán romper la maldición que les acecha incluso en las oscuras aguas del Atlántico...

Opinión personal

Empecé a leer este libro con el temor de que me recordase en algo a la saga Medianoche, que solo de pensarlo, siento escalofríos. Pero no, afortunadamente, el estilo de la autora ha madurado y que sea un libro autoconclusivo también es de ayuda. 

El libro comienza con Tess, criada de los Lisle, que es atacada en un callejón por un hombre muy peligroso y por... ¿un lobo?  Por suerte, recibe la ayuda de un joven del que no sabe nada. Al día siguiente, ella debe embarcar en el Titanic para abandonar Londres con los Lisle. Tess pretende llegar a Estados Unidos y empezar una nueva vida allí, dejando de ser la criada de esa familia excéntrica de insoportables para la que sirve. 

Una vez en el barco, Tess se encuentra con una desagradable sorpresa. A bordo también viaja el hombre que la atacó anoche y... el chico que la salvó.

De esta forma conocerá a Alec, y descubrirá su más oscuro secreto. Tess se siente irremediablemente atraída por él pero... ella no es más que una criada y él es un viajero de primera clase, hijo de un hombre de negocios americano que tienen una enorme fortuna.

No es de extrañar, por tanto, que la señora Lisle, lady Regina, quiera casar a su hija Irene con Alec. Por su parte, Tess sufre el acoso del cazador Mijail, quien se siente atraído por el morbo de matarla. ¿O es algo más lo que busca de ella? 

La novela arranca con el tiempo contado. Tess embarca el 10 de abril de 1912 en el barco más lujoso del momento: el Titanic. Todos sabemos ya  que el transatlántico sólo realizó una travesía, por lo que me he pasado más de medio libro esperando y temiendo el desenlace. 

Las historias de amor (porque hay más de una) son todas muy tópicas, pero aún así me han gustado por una simple razón: Claudia Gray toca todos los puntos conflictivos de la época. Encontraremos la historia de  amor de un sirviente y alguien de la nobleza; la historia de alguien noble que se aprovecha de la servidumbre; historias de amor donde lo que se interpone no es la posición social, sino la cultura, los orígenes... Amores muy variopintos que le aportan un punto extra al libro. 

En cuanto a los protagonistas, tenemos a Tess, que nos narra la historia en primera persona y, como punto a destacar, a veces se dirige directamente al lector, haciéndonos todavía más partícipes de la historia. También está la familia Lisle: Lady Regina, uno de los personajes más odiosos de toda la historia, sus hijos Layton (que sigue la estela odiosa de su madre), Irene (la única que me cayó en gracia de la familia, toda bondad y compasión) y Beatrice (la pequeña de cuatro años que apenas hace algo más que llorar y tirar cosas). Les acompañan los criados: la señora Horne (casi tan insufrible como su señora) y Ned (amigo de Tess y muy buena persona). 

Por otro lado, también encontramos a la familia de Alec, los Marlowe. Su padre le acompaña en el barco y es un hombre que me ha encandilado por su carácter. También está el vizconde Mijail Kalashnikov, que sufre una obsesión con matar a Tess. Y tenemos muchas, pero muchas, menciones a personajes famosos que viajaron en el barco. 

En cuanto a la historia, tiene mucha acción y atrapa enseguida. Una vez que comencé a leer, me sumergí en una lectura ligera que me leí casi sin darme cuenta. Lo acabé en dos ratos. Te absorbe sin que te des cuenta. Y, pese a que he comentado ya que me pasé medio libro esperando el final del Titanic, cuando éste llegó, me sorprendió muchísimo. 

He adorado la parte en la que el barco comienza a hundirse. Tess nos hace partícipes de los momentos de angustia que se vivieron a bordo, de la lucha por sobrevivir de algunos y de la incredulidad de otros. 

Impacta mucho el final, no esperaba que pasaran ciertas cosas y la verdad que el libro me ha dejado un gran sabor de boca. La única pega (cómo no) es que algunas veces había fallos en el libro, como expresiones extrañas y palabras que existen, pero que suenan mal (¿sudorienta?, ¿en serio?, ¿no queda mejor sudorosa?). Ya sabréis que a mí esas cosas me sacan de quicio. Pero dejando eso a un lado, no tengo más quejas. 

En definitiva, una novela en la que Claudia Gray saca a relucir su mejor estilo, con fecha de caducidad y que atrapa al lector con una trama de los más original y que, pese a tener un montón de tópicos, sirve para pasar una tarde muy agradable disfrutando de ella. 

Puntuación: 8,5

No se trata de una novela que deja huella, pero sin duda, la recomiendo muchísimo porque, además de tener una ambientación muy original, nos mantiene pegados a sus páginas y tiene un final impresionante. ¿Os animáis? ¿Lo habéis leído ya? 

Besos,