Preciada. Caragh M. O'brien

Autora: Caragh M. O'brien

Editorial: Everest

PVP: 14,96€

Páginas: 494

Encuadernación: tapa blanda con solapas






Sinopsis

Gaia Stone, comadrona de dieciséis años, se adentra en los páramos con su hermana casi recién nacida, unas pocas provisiones y un simple rumor a modo de brújula. Aunque sobrevive, es atrapada por las gentes de Sailum, sociedad distópica donde mandan las mujeres, pese a la superioridad numérica de los hombres, y donde besarse es delito. Para ver de nuevo a su hermana, Gaia debe someterse al estricto código social y a las opresivas reglas de la Matrarca Olivia. Entre tanto, dos hermanos compiten por ella mientras intentan comprender la trampa medioambiental que mantiene atrapados a los habitantes de Sailum, por lo que Gaia debe enfrentarse a la emocionante, incómoda e inédita experiencia de sentirse deseada.
Sin embargo, cuando se reencuentra con alguien del pasado, la joven descubre que la supervivencia no basta y que la justicia requiere sacrificio.

Opinión personal

Cuando leí Marca de nacimiento, tengo que reconocer que me costó engancharme. Y el final, calcado al de otro libro de género distópico, me decepcionó un poco. Por eso he tardado tanto en leer esta segunda parte. Tras haberlo hecho, lamento no haberlo leído antes porque me ha gustado mil veces más que el anterior.

Gaia ha escapado del Enclave con su hermana pequeña Maya en brazos. Ha dejado atrás todo cuanto conocía y amaba: sus padres han muerto, no sabe qué ha sido de León, ni qué les depara el Enclave a sus amigos. Y todo en busca del Bosque Muerto, un lugar del que no sabe nada: ni dónde está ni si es real.

Pero la sorpresa de Gaia será mayúscula cuando descubra que sí existe, sólo que se llama Sailum y que es mucho más terrible de lo que se imaginaba. Una vez allí, se encontrará con una sociedad donde mandan las mujeres pese a ser minoría. Es una dictadura donde los hombres no tienen ni voz ni voto en las cuestiones de la sociedad, donde son juzgados (y condenados) por el simple hecho de abrazar a una mujer sin estar prometido a ella.

Todo el que se queda en Sailum un par de días deberá hacerlo de por vida: una enfermedad asola a los habitantes del páramo y los hace morir si se alejan. Igualmente, hay una extraña maldición que afecta a los nacimientos: sólo nacen niños, por lo que las mujeres están en clara minoría y la sociedad corre el riesgo de que Sailum se extinga. Hay nueve hombres por cada mujer, y cada una de ellas está obligada a tener diez hijos para preservar Sailum.

En este panorama, Gaia llega para convertirse en la comadrona de Sailum, pero deberá someterse a las estrictas y extrañas leyes que rigen la sociedad y a la férrea dictadura de la Matrarca y sus damas.

El libro me ha gustado más porque, gracias a la nueva sociedad de Sailum, nos daremos cuenta de que el Enclave no era tan terrible y de que Gaia se ha salido de Guatemala para meterse en Guatepeor, como suele decirse.

Es una trama tremendamente original. Sinceramente, esperaba que Gaia llegase a los páramos, se diese de bruces con una Resistencia al Enclave ya organizada y se lanzaran a la guerra para derribar los muros del Enclave. No ha sido así y me ha gustado muchísimo. La sorpresa de encontrar algo todavía más controlador e injusto que el Enclave ha supuesto un punto de inflexión en la historia y la ha situado entre mis favoritas.

He estado enganchada durante toda la lectura: no sabía qué podía pasar a continuación y con qué iba a sorprenderme la autora a medida que avanzaba el libro. Ha sido adictivo y menos mal que tenía el tercero ya en casa.

En cuanto a personajes, salvo Gaia y Maya, todos son nuevos. Eso, junto a la nueva ambientación y los giros de la trama, hacen de este libro algo completamente diferente de su primera parte: es un soplo de aire fresco que he agradecido con toda mi alma. Me ha gustado el personaje de la Matrarca Olivia, el de Dinah y también el de Josephine. Los hermanos Chardo (Peter y Will) podrían haber sido también unos protagonistas destacados en la historia y, aunque en cierta medida lo son, no son santo de mi devoción.

Y es aquí cuando viene la pega que le pongo al libro: esta vez nos alejamos del triángulo amoroso para presenciar algo diferente (y que espero que no sirva de ejemplo para el resto de tramas de novela juvenil): un cuadrado amoroso. Tres personas se disputan el corazón de Gaia y ella se deja querer: Leon, Peter y Will. Lo he visto innecesario y muy forzado. Sí que entiendo que en un lugar donde apenas hay mujeres llegue una chica nueva y todos quieran llamar su atención. Es normal y comprensible. Pero no lo es tanto la forma en la que Gaia se cuelga de los dos hermanos Chardo sin olvidar a Leon.

Cambiando de tercio, otra de las cosas que me han gustado de la historia ha sido el personaje de Leon. Ya era mi personaje preferido en Marca de nacimiento, pero el aire de tipo duro resentido y reservado que se le da en este segundo libro le sienta bien. Hace de un personaje que ya era misterioso todavía más atractivo.

Las historias tan dispares que nos traen Marca de nacimiento y Preciada tienen todo el aspecto de conducirnos hasta una tercera parte de infarto donde las tramas de uno y otro libro se unan; Preciada no ha sido un libro puente entre el primer y el tercer libro, como suele ocurrir normalmente, si no que ha traído su propia historia con la misma protagonista. Gaia lleva todo el peso de lo ocurrido en el Enclave y ahora pasará por cosas diferentes (y tampoco muy agradables) en Sailum. Se notará el progreso en el personaje, tanto en su personalidad como en sus circunstancias.

Con esta novela, Caragh M. O'brien nos demuestra que tenía mucho potencial para su historia y que ha sabido llevar el material a buen puerto. Si la primera parte fue una distopía a tener en cuenta, esta segunda hace que escale puestos en el ranking a pasos agigantados.

Puntuación: 9